25/9/07

Estación Caricatura

Conocí el trabajo creativo de un sujeto que se llama Enrique Coral (Pueden buscarlo por su nombre en Facebook si les gusta mucho el trabajo que realiza) y me pareció apenas como para darle una pequeña vitrina en mi blog... por eso, sin mayores preámbulos, y con fotos –nuevamente– de Joan Rojas, les dejo un poco de ingenio y buen humor (clic sobre la imagen para agrandar).






Para otros contenidos prestados, clic aquí...

24/9/07

Estación trabajo


Hay que estar muy jodido para tratar de vender un único flotador para niños en medio de una calle ejecutiva y llena de vehículos como lo es la 85 con 20 en Bogotá, donde el clima permanece frío y lluvioso y hay muy pocas piscinas cerca (incluso, si se fijan en la foto, el transeunte que pasa al lado del vendedor cabizbajo lleva una sombrilla en la mano)...

... Quizás más común, pero posiblemente más deprimente, es tener que aparcar en cualquier acera para tratar de vender la desgracia propia por medio de la lástima ajena.


Estas fotos no son más que la captura de panoramas comunes y desoladores de una tierra breve en oportunidades como lo es la nuestra... tan cotidianos que, como se ve en las fotos, la gente ni se percata de lo que sucede y sigue su camino, como si estas personas abandonadas por la suerte y la fortuna fueran parte del paisaje...


Para otras realidades comunes a nuestras ciudades latinoamericanas, clic aquí

19/9/07

Estación talento

El que sabe, sabe... sino me cree, pregúntele a Paul Potts...



Para otros talentos musicales, clic aquí...

7/9/07

estación batalla


Once Upon A Time
–Said the Storyteller–
There was a kill that destroyed the world

Hubieras visto su cara de espanto. Esa noche nos había desconocido a todos. Miraba a su alrededor con sus ojos pardos como un bebe que descubre su universo visual sin objetivos claros. En realidad eso era lo que más hacía que nosotros también sintiéramos miedo…

Por aquellos tiempos la hoguera hubiera sido lo menos para sus demonios; para saciar la ignorancia humana que rechaza y condena aquello que no comprende, aquello mismo que es la muerte y la enfermedad. Pero hubo luz, hubo gardenias en medio de la desesperación y cesaron las llamas.

A pesar de que el fuego de esos días dejó sus heridas, también fue suficiente cauterio para encerrar los demonios (De vez en cuando alguno se escapa, pero no es fácil darles alcance… qué más quisiera…).

Sin embargo, aunque me queda la certeza de una batalla terminada, la tierra es fértil para que la guerra se desate, y sólo queda esperar y confiar en su espíritu grande y sereno, en su sello divino contra los provocadores ocultos en el laberinto, como única esperanza de llegar hasta el final más allá de todo
terremoto.

Y aunque de cuando en cuando tiembla, todavía reposan las extremidades de las aves sobre el suelo, presagiando la calma, desafiando el acecho, mientras nosotros empuñamos la espada con la esperanza de nunca más tener que usarla.

Para otros textos personales, clic aquí

5/9/07

Estación opinión política


Usualmente este blog es mi santuario. Pero nada me parece mejor que otras voces se hagan partícipes por deseo propio, sobre todo cuando el tema tiene tanto que ver con mi realidad.

Esta crítica es un espejo de una de las realidades de nuestro país, que usualmente, por su espíritu crítico en contra de las instituciones estatales, no hace parte de la primera plana de los principales periódicos nacionales. En todo caso aquí llegó a parar y creo que vale la pena...

Un justa reflexión de Joan Rojas, fotógrafo de profesión (quizás lo recuerde en este blog por la foto de las botellas) y artista en el resto de su tiempo… ...
ahí los dejo...

“El pasado 21 de Junio se inauguraron dos colegios en la localidad de Bosa. Cada evento fue una clara burla para los familiares del magistrado Alfonso Reyes Echandia, presidente de la corte suprema de justicia y desaparecido en la fatídica toma del palacio de justicia en 1985 a manos del M-19. Y digo burla porque uno de los dos colegios lleva el nombre del magistrado y el otro quese inauguró minutos más tarde, lleva el nombre de uno de los perpetradores del asesinato del mismo, Carlos Pizarro Leongómez. Es irónico pero al alcalde Garzón le pareció divertidísimo reunir a las familias de estos dos personajes en pro de la tolerancia. Entonces ¿el que peca y reza empata?

Para Lucho Garzón el hecho de que Pizarro haya entregado las armas es un motivo suficientemente heroico para que sea merecedor de llevar el nombre de un colegio; ahora toca recordarlo más por este hecho, que por sus actos delictivos, que fueron muchos. El magnicidio del palacio de justicia y todo el sufrimiento que causó, es sólo un ejemplo.

Yo sólo recuerdo que los colegios tenían nombres de presidentes, deescritores y uno que otro mártir, ahora también ¿se le rinde homenaje a un delincuente (Para algunos el termino adecuado es "idealista") porque decidió parar y bajar las armas? ¿Acaso para el alcalde no hay colombianos más representativos para el país?, gente que trabaja por él y se han destacado por su labor? Esto sólo refleja preferencias políticas e idealistas que por el contrario pueden generar más intolerancia y sentimientos encontrados.

Es respetable la asistencia de Alfonso Reyes (y sus hermanos) a la inauguración del colegio que lleva el nombre de su padre, y es un hecho para admirar, pero es algo por lo cual no tenían porque pasar ni él, ni la familia de Pizarro, primero porque evocar una tragedia es incomoda y segundo porque lo único que recibieron es el nombre de su padre como homenaje y una invitación a presenciar un segundo a la impunidad. O si es algo tan normal, ¿porqué no crean dos bibliotecas una en Honor a Luis Carlos Galán y una contigua llamada biblioteca Pablo Escobar Gaviria, o un jardín infantil "Luis Alfredo Garavito" ya que ahora es un pastor cristiano? Todo esto puede sonar ridículo pero sólo demuestra a lo que puede llegar el capricho de algunos y nuestra falta de memoria política e histórica”.

Para otros contenidos prestados, clic aquí...

3/9/07

Estación memorias


No todos los recuerdos se encuentran en la catedral. Algunos, como los fractales, son un tanto caóticos y anárquicos. Agreden la estructura y rompen su sacra armonía de catorce paredes con vitrales coloridos, para finalmente cambiar y desvanecerse como lo hacen algunas lealtades cuando se alteran las relaciones de poder...

... Sin embargo, como todo en la vida, su monstruosidad depende del lugar desde donde se observe. Tanto tiempo después le encuentro belleza al arma y aprendo de sus movimientos. Es más, quizás nunca llegó a ser un arma y su apariencia desproporcionada fue tan sólo la triste alteración de una fibra descompuesta...

– Baje del diván –pidió el doctor mientras se levantaba de su asiento y tomaba un puñado de papeles de su escritorio–. Ahora dígame, ¿qué ve aquí?...

Para otros momentos 'textuales', clic aquí